En estas edades, es básico respetar los principios de desarrollo cognitivo y socio-afectivo, manteniendo una organización del tiempo lo más natural posible, sin forzar el ritmo de la actividad y manteniendo las constantes temporales.
Estas constantes temporales están marcadas por las rutinas diarias que se convierten en Infantil en situaciones definidas, sistemáticas, que se van a dar de forma regular a lo largo de la jornada y del transcurso de los días.
El alumnado de Infantil necesita que estas rutinas tengan siempre más o menos la misma secuencia para sentirse seguros y alcanzar autonomía y equilibrio personales.
En este proyecto contamos con rutinas de entrada, es decir, de acogida y de cierre. Para ello, contaremos con las canciones como rutina de entrada y diferentes cuentos que se irán relatando. También se regarán las plantas del centro y/o los alimentos cultivados en el huerto.
Asimismo se realizará un registro en lo referente al día, mes, hora, temperatura y tiempo meteorológico que hay, ya que son aspectos que afectan a la hora del cultivo. Como cierre, anotaremos aquellas palabras nuevas adquiridas en el diccio-huerto.