¿Cuál es tu trayectoria ecológica?
Mi madre y padre siempre se han dedicado a la agricultura ecológica, desde hace 35 años más o menos. Yo llevo seis años haciéndome cargo de las tierras, al final me lo pasaron a mí, que me quedé a vivir en el pueblo. Estuve unos años trabajando en una fábrica, pero la verdad es que me cansé de trabajar allí y decidí volver al campo. Y aquí estoy. Al aire libre se trabaja mejor, lo prefiero. Cultivamos patata, alubia, garbanzo y este año voy a poner también alubia pocha de Sangüesa.
¿Por qué decidiste ir al EKOmercado?
El año pasado saqué 700 kilos de garbanzos y no sabía cómo venderlos. Me puse en contacto con CPAEN/NNPEK y así surgió la oportunidad de venderlo a través del EKOmercado. Y así le estoy sacando salida. Además del EKOmercado de Pamplona también voy todos los meses a Plazara! en Estella. La verdad es que estoy contento con el EKOmercado; me gusta y hay movimiento, es la capital y se nota que se vende muy bien. En Pamplona vendo mucho garbanzo y también alubia. Un día lleve 12 kilos de alubia y me los quitaron de las manos.
¿Cómo animarías a consumir productos ecológicos?
Animaría a todo el mundo a consumir ecológico, es mejor y es natural. A los cultivos se les echa mucho pesticida y no son nada sanos. Yo a la patata no le echo ni abono y se cultiva prácticamente con lo que cae del cielo y el sol. Dependemos del tiempo y del agua, y a veces hay años malos, pero es mucho más sostenible y saludable. Hay que apostar por lo ecológico. Es cierto que cada vez hay más conciencia y se está promocionando muy bien. Varias tiendas a las que surto también han pasado a tener más ecológico que convencional, eso está muy bien.