Cuéntanos, ¿qué es Viveros Sola?
Tenemos una pequeña explotación en la Ribera. En una parte tenemos vivero y hacemos planta en ecológico y para el aficionado; y en otra parte tenemos la producción hortícola. Todo en ecológico.
Llevamos en el cultivo ecológico desde el 2010, después de pasar los años de conversión que requiere CPAEN/NNPEK. Pasarse a la producción ecológica fue una decisión muy dura, pero nos veíamos con la obligación principal de que teníamos que hacer algo y estábamos muy hartos de la agricultura convencional. Afortunadamente tomamos esa decisión y ahora estamos muy contentos.
¿Qué trayectoria tiene vuestra empresa?
Empezamos hacia el año 1984-1985. En el año 92 se unió un primo mío y desde entonces hemos estado los dos. A partir de ahí tuvimos dos explotaciones, uno se dedicaba hacer planta y el otro se dedicaba hacer el cultivo ecológico.
Ahora, ha tocado el relevo generacional. Por parte de mi primo ha venido su hijo y mi hijo también ha tomado relevo. Por suerte, a pesar de los tiempos que vivimos, vamos a tener relevo generacional…
De hecho, lo que más siento es que me llegue la edad de jubilación, porque vivo con tanta pasión mi trabajo que incluso siento pena de que esto se acabe… Incluso teniendo a los jóvenes detrás que es un aliciente añadido.
¿Por qué decidiste pasar de la agricultura convencional a la agricultura ecológica?
La ventaja principal que descubrí después de llevar 25 años en agricultura convencional es que la agricultura ecológica es una agricultura que te permite pensar.
La agricultura convencional es una agricultura que te mueves por inercia y la agricultura ecológica te hace tomarte las cosas con mucha pauta: tienes que aprender a observar, cosa que no te ha enseñado la agricultura convencional. Yo digo que la agricultura ecológica es la parte de mi vida que más me ha apasionado.
Tener un trabajo que les apasione es lo que le diría a la juventud. Este trabajo te permite la posibilidad de ser creativo, de poder elegir tu propio camino que es muy importante, y que no te lo marquen los demás. Este tipo de agricultura te ofrece la posibilidad de poder marcarte objetivos e ir hacia ellos.
¿Qué beneficios habéis obtenido después de la transición?
A partir de que empezamos a trabajar en la agricultura ecológica nos dimos cuenta de que nuestro abanico de posibilidades aumentaba; vimos que podíamos empezar a trabajar desde la semilla, y para nosotros era muy importante empezar a trabajar con variedades autóctonas.
Ahora tenemos la posibilidad de poder controlar desde la semilla, la producción y la venta. Tenemos un ciclo cerrado que es lo que nos distingue con el resto hoy en día.
¿Qué te ha aportado CPAEN/NNPEK todos estos años?
De CPAEN/NPPEK valoro que es gente joven y la gente joven tiene siempre más ganas de hacer cosas. Cuando tienes una dificultad encontramos el camino y la ayuda para resolverla. Nos ayudan y muchas veces tienen paciencia con todos los papeles que presentamos. Lo que más nos cuesta es rellenar los papeles; además, cuando un joven ha elegido trabajar en el campo, lo que quiere es estar en el campo, no rellenar papeles.
